
El partido gobernante turco señaló que el periodista Jamal Khashoggi fue víctima de un asesinato «monstruosamente planeado”, por lo que rechazó la versión de que murió en una pelea, mientras crece el escepticismo por las diversas versiones saudíes sobre la desaparición del periodista.
Khashoggi, columnista de The Washington Post y crítico del príncipe heredero saudí, Mohammed bin Salman, desapareció hace tres semanas al entrar en el consulado de Arabia Saudita en Estambul para obtener documentos para su matrimonio.
La reacción posterior de Riad, quien en un principio negó saber el paradero del periodista y luego dijo que falleció en una pelea en el consulado, fue rechazada por los gobiernos occidentales, lo que provocó un ambiente tenso en las relaciones con el mayor exportador mundial de petróleo.
Legisladores estadunidenses expresaron su molestia contra el príncipe heredero, de quien sospechan ordenó la muerte del periodista.