
El Senado de Argentina rechazó la legalización del aborto, en una sesión donde los polémicos discursos minimizaron las violaciones, compararon humanos con chimpancés y aseguraron que se podría abortar hasta los nueve meses de gestación.
A 10 horas de iniciada la sesión, se consolidó la negativa a la Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo con una tendencia de 38 votos a favor, 31 en contra y dos abstenciones.
Más allá del resultado, donde se esperaba la composición conservadora de la cámara alta, lo que más sorprendió y provocó indignaciones y críticas fueron los argumentos expuestos por los senadores contrarios a la legalización.