
Información: Evelyn Román
Veracruz, Ver.
El presidente de la Confederación Nacional de Porcicultores, José Luis Caram Inclán, reconoció que los aranceles del 20 por ciento que colocaron a la importación de carne estadounidense, no frenaron la entrada masiva de carne de cerdo proveniente del país vecino.
Por ello, el empresario consideró que el gobierno federal debe exigir al gobierno estadounidense que el ingreso de carne proveniente del país vecino tenga el mismo costo de la carne mexicana.
«El costo de la pierna y del brazuelo en Estados Unidos son cortes de descarte y por lo tanto no traen precio, les es mas caro pagar la energía para conservarlo congelado que mandarlo con precios depredatorios a México y eso hace que esos cortes que ellos no usan entren a México con precios muy por debajo de los costos de producción (…) la SEDARPA y la Secretaría de Economía deben llegar a acuerdos con Estados Unidos», dijo.
Caram Inclán recordó que anualmente el 12 por ciento de la carne de cerdo que se consume en el país es estadounidense que se traduce en 900 mil toneladas de carne.